domingo, 16 de diciembre de 2012

martes, 3 de mayo de 2011

Mourinho se juega su credibilidad.

Hoy no caben excusas. Mourinho contra su estilo. Ni que decir tiene que no le queda más remedio que salir a por todas en el Camp Nou.

Estoy expectante por ver las decisiones que toma hoy el técnico luso en cuanto a estrategia se refiere, pues lo que se dice atacar no es que se le dé muy bien. Si hasta ahora ha hecho tantos goles en Liga no ha sido más que por las individualidades de un genial Di María, que cada día rentabiliza más lo que se pagó por él, un Higuaín excelso y un Cristiano que marca goles, sí, pero por lo general en los minutos de la basura cuando ya está todo resuelto.

Quiero ver cómo el Real Madrid ofrece algo más en ataque, un ataque menos posicional y más colaborativo en el que haya un pase al hueco o una jugada trenzada en la que obligue a los centrocampistas contrarios a buscar el balón. Quiero que haga una apuesta por la posesión ya que jugadores tiene para llevar a cabo tales lides. En resumen, un Real Madrid que se lo ponga difícil al Barcelona, como aquel Madrid de Pellegrini en el Nou Camp, que no le perdió la cara al partido ni un solo minuto y que llevaba la manija del partido, a su antojo en un espectáculo futbolístico sin igual en el que los dos equipos hacían honor a sus historia.

Estos no dejan de ser mis deseos, pero espero que sean los que todo aficionado debería tener. Basta ya del conformismo que rodea al hincha entorno a la figura de Mourinho. Hay vida más allá de su estilo ramplón.


¡Un saludo Offsiders!
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jueves, 28 de abril de 2011

El post-clásico de Champions


Me he hartado de leer esta mañana, tanto en diarios pro-merengues como pro-culés, las injusticias que ha habido o dejado de haber en este último Clásico. Pero lo que nadie ha dicho es que el partido, tanto si el Madrid tuviese 11 o tuviese 10, ha sido un auténtico aburrimiento para el más común de los aficionados al fútbol dejando a un lado los fanatismos.



En realidad esta es la tónica que han seguido todos y cada uno de los partidos de este carrusel de clásicos: un equipo que no quiere la pelota y se dedica a esperar; y otro que no sabe cómo meterle mano. En resumen, los centrales del Barcelona han monopolizado el balón. Todo esto, claro está, hasta la rigurosísima expulsión de Pepe que, a mi humilde parecer, con una amarilla hubiera bastado.


Pero seamos coherentes y no nos dejemos engañar por la nebulosa radicalista de los diarios afines a uno u otro bando. El planteamiento de José Mourinho se expone a estos riesgos y todos recordamos el pisotón de Arbeloa a Villa en Copa o la entrada de Pepe a Busquets (del mismo estilo de la de ayer, si cabe más grave). No olvidemos las exageraciones de Alves y Pedro ni tampoco los manotazos de Adebayor y el pisotón de Marcelo. Los dos equipos tendrían cosas de las que lamentarse con el árbitro y creo, que si sumamos pros y contras, el resultado ha sido justísimo.


No voy a entrar a debatir si la estrategia de Mourinho es o no la apropiada para el Real Madrid, ya que cuando se le fichó se sabía perfectamente a quién se traía para el banquillo. Es libre de atacar o defender como le de la gana, ya que los títulos lo avalan, pero lo que no entiendo es el conformismo del Bernabeu y la demagogia barata de la que hacen gala los seguidores del Real Madrid este año. No sé que les habrá dado Mourinho o Florentino de comer a la prensa y aficionados madridistas o afines al Madrid, pero el hecho es que hace unos años el equipo blanco entonces entrenado por Fabio Capello, salía pitado del estadio madridista debido al pobre juego que ofrecía su conjunto y, aún proclamándose campeón de Liga, la directiva se vió en la obligación de contratar al alguien que ofreciese un juego más vistoso. Y lo peor de todo es que, 300 millones después, no se ve una evolución en cuanto vistosidad de juego se refiere, más bien todo lo contrario: involuciona comparándolo con el Madrid de Pellegrini.


Ni de que hablar tiene el calentamiento pre-partido (también de Guardiola) y la rueda de prensa post-partido de Mourinho. Lamentables. Toda la razón que podía haber tenido la perdió de un plumazo en 12 minutos de la comparecencia más escandalosa vista en años en una sala de prensa. Jamás se ha visto poner por tierra de una forma tan barriobajera los éxitos de otro club gracias a las supuestas "ayudas arbitrales", cuando prescisamente él, en sus dos Champions League, no se puede decir que no haya sido favorecido por los trencillas. En la hemeroteca están la expulsión de Andrade (tan significativa como la de Pepe) en las seminifinales del Oporto-Deportivo de 2004, así como las más que discutidas decisiones arbitrales en cuartos de final y seminales de la pasada campaña. Con esto no estoy justificando el pésimo arbitraje de Wolfgang Stark, sino la frágil memoria de técnico luso.


Ahora ya sólo queda pensar en qué deparará a cada equipo el final de campaña. El F.C. Barcelona es virtual ganador de la Liga y tiene pie y medio en la final de la Champions, mientras que el Real Madrid ya tiene su título asegurado, la Copa del Rey, con el que no sé si Florentino y el aficionado madridista podrán colmar sus deseos.

Sólo espero que el aficionado madridista se de cuenta que teniendo en su equipo a Ozil, Alonso, Granero, Kaká, Di María, Ronaldo, Higuaín, etc. se puede hacer algo más que esperar atrás y jugar al patadón. Condiciones tienen para ello. Me remito a la frase de Cristiano Ronaldo después del partido: "No me gusta jugar así, pero es lo que hay".


¡Un saludo Offsiders!



Actualización: Paco García Caridad, se hace eco del vídeo que demuestra (no sé hasta que punto creíble) que Pepe sí le dio a Alves.
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viernes, 25 de marzo de 2011

La cantera al poder

Los últimos años han sido realmente demoledores en el fútbol español en cuanto a inyección económica se refiere y, como siempre, existen dos grupos bien diferenciados: Real Madrid, F.C. Barcelona y los demás.

Quitando a estos dos gigantes de la Liga que invierten ingentes cantidades de dinero en la contratación de jugadores, las cosas no pintaban fáciles para los equipos medianos, pequeños y recién ascendidos que tienen que lidiar con patrocinadores y contratos de televisión para conseguir una cantidad suficiente de presupuesto que les permita afrontar la temporada con una mínima garantía.


Visto el panorama que se presentaba, los clubes empezaron a contratar jugadores extranjeros más baratos y de dudosa reputación: Cléber Santana por el Atlético de Madrid; Shota Arveladze por el Levante o Finnan y Nakamura por el Espanyol, por poner algunos ejemplos. Si bien eran jugadores reconocidos en ligas menores, no dejaban de tener una ficha importante para el rendimiento que podían dar y que, finalmente, han dado.

Urgía encontrar soluciones que satisficieran tanto económica como deportivamente y la decisión casi unánime que tomaron la mayoría de clubes en España fue la siguiente: la cantera. Sí, la solución estaba en casa y, además, con una rentabilidad económica tanto a corto como a largo plazo pues, en el caso de que el jugador hubiera despuntado, se podría vender por una cifra más que aceptable y si no lo hubiera hecho la ficha a asumir sería irrisoria en comparación con la de cualquier extranjero.

Pero analicemos a los dos equipos que mejor lo han llevado a la práctica y, además, de dos maneras diferentes. Por un lado, el Espanyol. Después de horribles experiencias con los ya mencionados Finnan y Nakamura así como Roncaglia, Sahar o Beranger, la paupérrima situación de las arcas y los constantes coqueteos con la zona de descenso, se optó por la solución de casa. Se sube al primer equipo a Víctor Ruíz, Dídac Vila, Raúl Baena, Jordi Amat, Ernesto Galán, Javi Márquez, Javi López o Álvaro unidos a los que ya estaban como Javi Chica o David García, y con buenos fichajes libres o a bajo coste, se hizo una gran plantilla que lucha por puestos europeos. Por si fuera poco, se vende en invierno a Dídac y a Victor Ruíz por un total de 16 millones de euros. Una operación redonda. Y el equipo sigue arriba. Increíble.

Otra forma de mantenerse a gran nivel económico y deportivo es la utilizada por el Villarreal. Ya de años atrás seguía la táctica del “compro barato-vendo caro” pero, eso sí, con un ojo para los fichajes que ya le gustaría tener a Txiki, Valdano, Monchi o quien se ponga delante. Un atacante que pasó totalmente desapercibido por Inglaterra como Diego Forlán llegó a Castellón por 3 millones de euros y se fue al Atlético de Madrid por 25. Lo mismo sucedió con Martín Cáceres. Tras una buena campaña como cedido en el Recreativo, se va al Barcelona por 18 millones. Y así un largo etcétera al que seguirán Rossi o Nilmar (10M cada uno).

Pero la estrategia que empezó hace unos años un visionario como Fernando Roig, el presidente, viendo que llegaba la época de vacas flacas, dio sus frutos. Empezó a comprar (o pagar la mitad del pase) a jugadores jóvenes y totalmente desconocidos que acabarían fogueándose en el Villarreal B a la espera de que dieran el salto al primer equipo al cabo de unos años. Y así fue. Marco Ruben, Mustachio, Montero y Escudero, unido a la prolífera cantera representada por Cazorla, Bruno, Mario o Javi Matilla y la incorporación de fichajes de más que contrastada calidad como Borja Valero, Nilmar y Marchena, hace de este Villarreal uno de los equipos más fuertes de la Liga e incluso llegó a pelear algún título en los últimos años.

Podríamos poner un largo elenco de jugadores jóvenes surgidos en los últimos años (Mario Suárez, Canales, Canella, José Ángel, Botía, Guaita…) pero no me llegaría un solo post para nombrarlos a todos. Por lo que se puede ver, la solución no sólo está fuera. Es obvio que para mantener un buen nivel y para ganar algo de marketing fronteras afuera es necesario tener algún extranjero en la plantilla, pero no la aglomeración que había en tiempos de bonanza. Éstos pueden ser suplidos perfectamente, incluso mejorados diría yo, por jugadores jóvenes y con proyección que pueden dar réditos a medio plazo.

Y sobre todo, y lo más importante a mi entender, que cualquiera disfrutaría más viendo a un chaval de su mismo pueblo o ciudad que al brasileño de turno. Fijaos qué espejo sería para los canteranos que sueñan con jugar en primera.

Protejamos el futuro del fútbol español.


¡Un saludo Offsiders!

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jueves, 24 de marzo de 2011

¿NBA o baloncesto FIBA?

He aquí la pregunta del millón. Ambos tienen amantes y detractores, pero veamos cuáles son los motivos que empujan a la gente hacia uno u otro sector.

La denominada mejor liga del mundo, no hace gala de ese nombre por casualidad. Tienen a los mejores jugadores del mundo posición por posición y una competición realmente igualada, pues el tope salarial es algo en común para todos los equipos y los jugadores “primera ronda” del Draft siempre suelen ir a parar a los equipos peor clasificados. Es realmente una estrategia brillante para poner la máxima emoción posible en el campeonato doméstico.


Pero hay algo que hace a esta competición mucho más importante a nivel global: un marketing brutal. Y no sólo eso, sino también los derechos televisivos por todo el mundo fruto de una buena campaña de publicidad unido a la diversidad de nacionalidades que pululan por la liga norteamericana.


Hablemos ahora de lo puramente deportivo: los partidos. Los jugadores deben tener una preparación física excelente para poder aguantar los 82 partidos de los que consta la temporada sin contar los play-off. El despliegue que estos hombres tienen que hacer a lo largo de la campaña no lo podría seguir en las mismas condiciones alguien recién llegado de las ligas europeas. Además, su estilo de baloncesto es mucho más dinámico, lo que favorece el espectáculo. Rara vez se agotan las posesiones y es muy normal ver a la estrella del equipo jugarse un tiro con 5 segundos trascurridos de posesión. He aquí su gran defecto: el juego de equipo.


Esto último es lo que no ocurre en el básquet FIBA. Aún no siendo tan espectaculares individualmente ni con una preparación física sobrenatural, existe algo de lo que deberían aprender los americanos: el colectivo. Ettore Messina, Bozidar Maljkovic, Aíto o Bogdan Tanjevic, por poner algún ejemplo, y sus clases magistrales de pizarra hacen que el baloncesto FIBA esté años luz por delante de la NBA en cuanto táctica se refiere. Unas defensas individuales, zonales y mixtas excelentes, transiciones perfectas y una paciencia en ataque que hacen de un partido una delicia táctica.


Por poner un ejemplo donde se puedan comparar directamente los dos estilos, no voy a hablar del partido España-EEUU de las olimpiadas (que si no fuera por los pasos otro gallo les hubiera cantado) sino de las semifinales Grecia-EEUU del mundial de 2006 en el que España se proclamó campeón.


En ese partido Grecia se comió a los americanos de un bocado con la cosa más simple y la primera que se aprende en las escuelas de baloncesto, es decir, el pick&roll (bloqueo y continuación). Esto, unido a una defensa férrea en la que llegó a haber hasta 3 ó 4 ayudas, desesperó a los EEUU. Y no hablemos ya de los últimamente famosos amistosos de los equipos NBA en Europa, de donde ya salieron escaldados más de una vez.


Yo me declaro amante incondicional del baloncesto FIBA donde la solidaridad entre jugadores es la bandera de cada proyecto deportivo. Sin los egoísmos de un LeBron o un Kobe que se tiran hasta las zapatillas en cada partido. Pero si hay algo en que gana la NBA es en la igualdad del campeonato. Aquí sigue habiendo las desigualdades de siempre: Madrid, Barça, Maccabi, CSKA, Oympiakos, Panathinaikos y el resto.


Algo tenemos que aprender de los americanos. Aunque sigo prefiriendo lo nuestro.


¡Un saludo Offsiders!

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miércoles, 23 de marzo de 2011

Mundo rosa en la prensa deportiva

Os hago una pregunta directa: ¿A cuántos de vosotros, amantes del deporte, os interesa leer en vuestro diario habitual si tal jugador está o deja de estar con la chica de turno? A un servidor, nada.

No sé si os habéis fijado en la evolución (o involución según se quiera ver) de los diarios deportivos españoles entorno al mundillo rosa. Tanto Marca en su Salón de la fama, Sport con Balón Rosa o la archiconocida contraportada del AS e incluso en alguna portada de éstos, me encuentro más a menudo de lo quisiera cotilleos sobre la vida del personal que no me interesan ni lo más mínimo.

Sin extenderme mucho en este post, quiero decir que ya tenemos suficiente basura en la televisión como para que también tengamos que aguantarla en diarios ysus respectivas webs, teniendo ya revistas especializadas en el tema. Supongo que estaréis pensando ahora en el típico argumento de "si lo ponen y se consume, la culpa es de los lectores. Si no lo leyeran lo hubieran quitado". Pues no me vale.

Hoy consultando Twitter, me hice eco de un tweet de José María Iñigo que, aunque está aplicado a la televisión, sirve perfectamente para el ámbito de la información escrita: "La gran pregunta. ¿Las televisiones programan lo que los espectadores quieren o los espectadores se tragan lo que las televisiones les dan?"

Reflexionad acerca de esto. Yo ya lo he hecho.


¡Un saludo Offsiders!
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martes, 22 de marzo de 2011

Valencia Basket o cómo reinventarse


Hablemos hoy de uno de los casos más agradables en el ámbito del baloncesto nacional, el Power Electornics Valencia.

Si echamos la vista atrás, en un pasado no tan lejano, nos acordamos de aquel Pamesa que asombró a propios y extraños con fichajes de relumbrón y con una plantilla que estaba llamada a marcar una época en la ACB. Nombres ilustres como Rigodeau, Montecchia y Tomasevic u Oberto (estos dos últimos a golpe de talonario, procedentes del Baskonia) habían sido fichados para afrontar con la máxima garantía la Euroliga.


Pero, cosas del destino, no se pudo pasar más allá del Top 16 y, en el campeonato doméstico, consiguieron una 3ª plaza que, sin embargo, no puedieron demostrar en los play-off quedando eliminados a las primeras de cambio por Unicaja de Málaga. Los dos años siguientes fueron un auténtico desastre. En la temporada 2004/2005 ni con el serbio Igor Rakocevic en la plantilla se pudo salvar la temporada: fuera de los play-off tras 7 años seguidos clasificándose y adiós a Europa. Pero tampoco fue mejor la siguiente ya que, tras un cambio radical en la plantilla, y aún haciendo una buena primera vuelta quedando subcampeones de Copa, terminó por quedarse fuera de play-offs por segundo año consecutivo.

Muchos cambios de entrenador, muchos cambios en la plantilla y una disminución notable del presupuesto comparado con la época de bonanza. Demasiada inestabilidad. Incluso en la parte alta del club, la directiva, directores deportivos y presidentes se cambiaban de buenas a primeras como si se tratase de una chaqueta y, por lo general, digamos que los conocimientos baloncestísticos de éstos eran escasos o, simplemente, nulos.


Ciertamente, el panorama pintaba mal. Se consigue en algún año llegar a play-off pero no hay ni rastro de aquel equipo que sorprendía a propios y extraños. Pero se llega a un punto de inflexión: temporada 2008/2009. La llegada de Spahija, previa destitución de Katsikaris, unido al anuncio de Juan Roig de dejar de invertir en el club en 2 años vista y la marcha del presidente Manuel Llorente al Valencia C.F. empezó a sentar las bases del gran equipo que es hoy.


En el año 2008/2009, con Spahija en el banquillo tomando inciativa en las contrataciones debido al margen económico en el que se movía el equipo, se empezó a traer al club taronja a jugadores que hoy tienen un papel fundamental en el equipo y a bajo coste. Uno de ellos fue Nando de Colo, fichado a un coste relativamente bajo y adelantándose a los grandes europeos y, el otro, Serhiy Lishchuk, un poco conocido 4 ucraniano que, si bien le costó arrancar, con el paso de las jornadas mejoraba notablemente. También se trajo aquel año a Thomas Kelati, Kosta Perovic y se sube a un jovencísimo José Simeón al primer equipo. Todo esto unido a la explosión de Víctor Claver y al fichaje de un Rafa Martínez que se convertiría en la estrella del equipo. Aún así, se preveía que con esta plantilla pasarían dificultades en el campeonato doméstico. Pero no podemos olvidar a una de las grandes revelaciones de la temporada: el desconocido australiano Matt Nielsen.


Ese año se gana la Eurocup, con Matt Nielsen alzándose con el MVP y, desde aquel momento perseguido por los grandes de Europa. Finalmente, sería contratado por el poderoso Olympiakos firmando un suculento contrato que Valencia Basket no se podía permitir. Fue también por ese motivo por el que no se pudo mantener en el equipo a Perovic o Spahija, si bien se hizo un gran esfuerzo por mantener a Víctor Claver o a Rafa Martínez.

Aún teniendo estas importantes bajas, contrataron a jugadores más humildes, pero con la misma o incluso mayor efectividad: Savanovic, Augustine, Omar Cook y Javtokas. Si tengo que poner un "pero" a esta temporada, sería la destitución del entrenador en principio destinado a cumplir con el objetivo de la temporada, Manolo Husseín. Pero fue inteligentemente sustituído por un perro viejo de los banquillos como Svetislav Pesic.


Ahora es cuando el basquet valenciano está disfrutando de verdad. Un entrenador de garantías y un proyecto sostenible económica y deportivamente hablando y un equipo dando lo mejor de sí en la ACB y en la Euroliga. ¿Qué más se puede pedir? Cómo reinventarse en época de vacas flacas es una tarea que Power Electronics Valencia ha culminado a la perfeccción y, teniendo esa pizca de suerte que se necesita en el acierto de jugadores y entrenador, no se puede dudar de la excelente toma de decisiones que se han llevado a cabo en el club.


Espero que esto sirva de ejemplo para todos los equipos porque a todos les tocará pasar por esta situación.


¡Un saludo Offsiders!


PD: Perdón si he metido la pata con algún dato. Si yerré, ¡decídmelo y rectifico!

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